Quiero ser hermosa

No recuerdo la última vez que me sentí tan mal.

Tontamente me enamoré, pensé que todo iba bien, que estábamos en sincronía y sentíamos lo mismo.

Fuimos al cine, se comporto como un caballero, pago todo y se me pasó el tiempo volando a su lado, me atreví y le agarre la mano, sentí que el corazón se me iba a salir, su cara se ve hermosa con la poca iluminación del cine, dibujando sus adorables rasgos faciales, su sensual barba y esos ojos que me atraviesan el alma. Quizá me precipité al tomarle la mano, desde hace unos días no responde mis mensajes, en clase ya no se sienta junto a mi, con trabajos y me saluda.

¿Qué fue lo que pasó? ¿En que me equivoqué?

Toda esta semana me la he pasado vomitando, tengo un nudo en el estómago que me dificulta comer, respirar, hablar... Sonreír.

Aún después de haber vomitado lo que comí, mas por obligación que por apetito, me sigo sintiendo horrible, quiero seguir vomitando aunque hayan pasado 10 minutos y mi estomago esté vacío, quiero vomitar hasta desaparecer.

No puedo dejar de pensar en él...

Siento un peso enorme en mi pecho, no quiero levantarme de la cama, no quiero seguir respirando, solo quiero cerrar los ojos y no volverlos a abrir.

Siento que en cualquier momento voy a romper en llanto, varias veces al día me dan ataques de pánico, me pongo roja, me enojo y me deprimo, me cuesta mucho dormir por las noches, la única manera que logro conciliar el sueño es después de llorar, y cuando mis ojos se cansan solos se cierran, pero mi mente sigue trabajando, diciéndome que me equivoqué en todo, que esta era mi oportunidad y la eché a perder.

Sigo leyendo las conversaciones, no entiendo donde esta mi error.

Mis duchas se han vuelto mas largas, lloro bajo la regadera y aunque el agua se enfríe no me importa, me quedo sentada contra  la helada pared, repasando todo lo que nos dijimos una y otra vez.

Y es tan estúpido de mi parte estar aquí sufriendo, no es como si nos hubiéramos declarado amor eterno, ni siquiera le confesé mis sentimientos.

Pero me mata, me mata su indiferencia, me mata mi ingenuidad, mi estúpida esperanza no quiere darse por vencida y me sigue diciendo vamos, de seguro piensa en ti, no es tan malo como piensas, todo volverá a ser como antes...

Y aquí estoy, esperando a que todo vuelva a ser como antes, que me vuelva a decir esas lindas frases, que aunque no son de película, probablemente es lo mejor que me han dicho en la vida, lo mejor que alguna vez me dirán.

Tantos consejos que pedí a mis amigos, a que me ayudaran a entender la mente masculina, los tips que me dijeron, al final parece que no sirvieron para nada, una vez mas he quedado olvidada...